Intento en vano someter mi gris peregrinaje
desprenderme de la imagen distorsionada
combatir la obediencia persistente con la cual te añoro.
Disparo palabras a la tarde desatendiendo tu ausencia
me entretengo de a ratos
arremeto contra tus oídos inútilmente
pretendiendo la paz solariega.
Consagración de mi representación
letras escarbadas desde el fondo
dar forma en papel a la clausura
mientras me esquivan las convicciones
y se esfuma la prudencia.
Es domingo y no estás
no me sirve
esperarte tanto
no quiero.